Comienza la tercera semana

Después de la media de Sitges, comienzo el lunes con la sesión semanal de natación. Alfonso tenía la intención de venir, pero no pudo. Confieso que después del primer día ya me di cuenta que lo de nadar se le hace cuesta arriba. Realmente la natación es aburrida, monótona, y poco estimulante. Para colmo es un deporte técnico, y cuesta un poco acostumbrarse a tener una respiración armónica, a no hiperoxigenarse, y mantener un ritmo de nadar si tirones.

En esta ocasión me sentí mucho mejor, superados los primeros quince minutos, es fácil dejarse llevar y te acostumbras, mas o menos a la respiración, consigues un ritmo bastante estable. Si consigues evadirte un poco del tedio que supone ver continuamente el fondo de la piscina, resulta más fácil hacer el entreno.

Francesc Calvet en Sant Joan Despí

Lo que realmente te rompe son las vueltas cada 25 metros. Preferiría no tener que cambiar el ritmo, parar y hacer giros constatemente. Tengo ganas de nadar en el mar, seguro que no es tan aburrido.
Hoy le pongo cinco minutos mas, y acabo la sesión con 35 minutos y unos estiramientos de piernas y brazos. Una ducha, y diez minutos caminando, y el primer día de la semana comienza con buen pié.

El martes quedamos por correo para salir a las 19:30. No viene nadie, así que después de 7 minutos de espera, me vuelvo a casa a coger el mp3 y tomo la ruta de Pedralbes por Sant Joan de Deu. Me siento bien, suelto, no me pesan las piernas después de la larga tirada de Sitges. Decido ir a un buen ritmo, por debajo de 5:00. El entreno me sirve para olvidarme de los problemas y evadirme un rato. Cuando estoy volviendo, a la altura de Esplugas, veo a Alfonso, le pego un silbido y una reprimenda. En el grupo va Flavio, Anna, Helena (todavía no tengo claro si es con o sin H), Josep, Jordi y Alfonso. Me uno a ellos y como Alfonso tiene que volver pronto, decidimos ir hasta el parque de Cervantes.

Me explica que estaba con el jefe y por eso no ha podido ni avisar por telefono que no podía venir a la hora. Llegamos en cabeza al parque de Cervantes y enfilamos la vuelta.
Volvemos bien, sueltos y a un ritmo en torno a los cinco minutos el km.
El día finaliza con 15,94km a un ritmo de 5:12, y un total de 1:22. No me siento cansado.
Entro a estirar en el gimnasio y aprovecho para hacer unas tres series de abdominales, que siempre van bien para mejorar el tono y la recuperación.
Buenas sensaciones, buen entreno y me siento bien, bastante bien.

El miércoles estoy cansado. Ya me ha pasado en otros miércoles, y posiblemente es debido a un sobre entrenamiento de running. Salgo solo con la intención de hacer series, y llego hasta la ciudad  deportiva del Barça. Mi primera serie de unos 500 metros en subida, la hago con dificultad. Me cuesta mantener el ritmo de 4:30, y el estar solo pesa como una losa.

Después tocan 500 m de recuperación a un ritmo suave de unos 5:40. Al finalizar el tramo, encaro el siguiente, esta es la mía pienso, es en bajada. Tengo que aflojar a los escasos 100 m. Un tirón en el gemelo derecho. Más bien un pinchazo me hacen replantear la situación. Después de intentarlo en varias ocasiones y volver a aparecer el problema, concluyo que lo mejor es no forzar.

Vuelvo a ritmo de 5:20 para casa y concluyo el entrenamiento pensado que es debido a una sobrecarga. Estaremos haciendo demasiados km semanales? Por suerte el lunes tengo hora en el fisio. Es el mismo al que va Jaume, Julio y Alfonso, así que es de total confianza. Lo consultaré el lunes y veremos a ver que tenemos que hacer, y sobre todo lo que no tenemos que hacer para evitar lesiones inoportunas.

Jueves toca descanso. No tiene mucha literatura, pero se agradece un  stop en el tragin de la semana.
El viernes no puedo salir, descanso forzado y por lo que me cuentan, es una salida interesante.

El sábado no solemos correr, así que quedo con Ramón, un viejo amigo, para jugar a golf. Nos vamos al par 3 de Can Cuyas, y la jornada transcurre bien. Excepto dos fiascos en los hoyos dos y cinco, saco una tarjeta decente. Tres hoyos en par y un +11 sobre el handicap del campo. "Pas mal" para no tocar los palos desde hace tres o cuatro meses. Gano a Ramón por tercera vez (he perdido siempre, así que es fácil contar los triunfos). Se desespera y promete editar su propio libro "El golf y la madre que lo parió".

Hoyo 4 y tee del 5 en Can Cuyas, que guapo

El domingo toca tirada larga con motivo de la cursa de Sant Antoni. Habrá tiempo de comentar el pisotón de Pepe, el resultado del español y que pasará esta próxima semana con la vuelta de la copa y el Real Madrid.
La crónica de la cursa de Sant Antoni, en el próximo post.